A nivel general:
Una economía regional cerrada implica menor crecimiento de la región.
Las trabas comerciales reducen la competencia entre las empresas y por lo tanto, los incentivos para invertir e innovar.
Para Uruguay:
Se incrementaría la dependencia regional a través de una mayor asignación de recursos en sectores de baja competitividad internacional.
Aumentaría el desequilibrio que tenemos en la balanza comercial con Argentina.
Tendríamos un peor desempeño en materia productiva de bienes y servicios y un menor bienestar de los consumidores.
El gobierno uruguayo ya se expresó al respecto. Según publica Búsqueda en su edición de esta semana Uruguay se manifestará en contra del aumento e invitará a Paraguay a sumarse a esta postura. No obstante, planteará un modelo con los socios de la región para ser complementarios productivamente en algunas ramas.
Fuentes: www.espectador.com, www.elobservador.com.uy, semanario Búsqueda, www.elpais.com.uy